¿QUÉ DICE IRINA DE CHILI’S?

Este año, mi prima decidió celebrar el cumpleaños de mi ahijado en Chilli’s. La idea era llegar a la “ley de Cristo” en plan totalmente informal. El concepto me encantó porque fue sencillo, íntimo y de alguna forma, muy especial. Nos gozamos al cumpleañerito porque estábamos sólo entre familia y tenía toda nuestra atención.
Yo no había ido al área de juegos (en Chili’s Zona 10), y en serio que me encantó, pude comer en paz porque el área está muy bien diseñada y los niños se la pasan genial, así que en lo que mami comía, ¡los jovenazos jugaban!
Sin embargo, no me gocé mi comida por estas 2 razones:
1) Me decidí por el “menú lunch” de quesadilla porque no quería algo tan caro ni tan grande. Lamentablemente, para el tamaño que era me pareció caro para ser una tortilla de harina doblada a la mitad.
Me sorprendió que no trajera guacamol, pues es como mandatorio combinarla con pico de gallo, crema y guacamol. Sin embargo, venía acompañada de unos frijoles parados muy ricos y arroz, así que mejoró un poco el plato.
Entiendo que es un menú mas económico y por ende se sacrifica (aunque no debería) la calidad, pero en serio estaba MUY escasa de todo. Poco queso, poco chile pimiento y muy muy poco pollo, lo que me lleva al siguiente punto:
2) Pedí una quesadilla de carne, ¡no de pollo! ¡PLOP!
Pude haberla cambiado, lo sé. Pero no soporto la idea de tirar comida o que haya consecuencias contra el mesero como cobrárselas (NO estoy diciendo que eso hagan en Chilli’s, pero en general me da siempre miedo que pase en cualquier lugar).
El servicio no fue malo y por eso como crítica constructiva, se lo hice ver al mesero quien muy amablemente ofreció cambiarla.
Resumiendo: ¿volvería a regresar? ¡Sí! Ante una invitación similar, no creo que por iniciativa propia. No es el tipo de restaurantes donde encuentre algo que se me antoje demasiado como para ir.
Eso sí, regresaría por los juegos porque definitivamente mis hijos los amaron. Y lo que es seguro, es que no pediría el “menú lunch” (o la quesadilla en general) para no arriesgarme a lo mismo.


Irina Rohrmoser Moreno